sábado, 28 de febrero de 2009

LA INQUSICION

Carta asociada al los signos de Virgo /Sagitario; y a los planetas Mercurio /Júpiter.

Interrogatorio; intolerancia; (política) hipócrita; ignora las diferencias de opinión; la seguridad de sentirse bien; búsqueda de un culpable.

El problema es que usted pretende probar su inocencia, presionando con intolerancia sin tener en cuenta las distintas opiniones que puedan tener las demás personas e ignorando sus creencias.
No se da cuenta que depende de la buena fe y la paciencia de esas personas, para poder exponer su defensa. Si usted lo hace agresiva y compulsivamente, sólo conseguirá, que todo se vuelva en su contra. No está desprovisto de hipocresía y poco respeto por los demás que si no fuera por su actitud poco sincera, podrían responder con misericordia y comprensión, buscando la forma de ayudarle y que la verdad sea probada. Con su actitud, sólo consigue aislarse y que se cierren todas las oportunidades de vindicación. Un aire de superioridad, de altanería, de engrandecimiento ficticio, sus palabras carecen de humildad y no tienen el acento de la verdad, su actitud hace que las circunstancias se vuelvan en su contra. Además no permite que lo contradigan ni le hagan las preguntas necesarias para indagar tratando de desentrañar la verdad. Tiene el convencimiento de que es el único que posee la razón, que no permite que nadie lo contradiga.
El camino a travéz del problema. Usted será sometido a un interrogatorio exaustivo y talvéz a persecusión, y el destino usará la fuerza del poder, con toda la severidad que amerita el caso, sin piedad, sin misericordia, con el único objetivo de que usted diga la verdad, o que confiese lo que la inquisición desea oir, No se trataría de un asunto de culpa o inocencia, aunque aparentemente fuera así, sino de un proceso, originado por la fuerte presión o el chantaje.
En otro sentido podría tratarse de alguien que se siente desvalorizado e impotente por encontrarse frente a un tribunal que lo está presionando para que confiese, pero no posee la instrucción ni los conocimientos necesarios para ocuparse de su defensa, entonces se encuentra abrumado por el dedo acusador y no acierta a reunir las palabras adecuadas, por lo que es posible que su caso esté perdido.
En la vida cotidiana puede pasar que se someta al consultante, a una situación en la que se vea acusado por la pareja, por un pariente, por el jefe o compañeros en su trabajo, o por un amigo y necesite probar su verdad pero la incredulidad, los intereses creados o la mala fe, lo condenan a ser considerado culpable, sin que se haya prestado atención a sus alegatos de defensa.
Toda sus experiencias su sentido común, su ecuanimidad y el conservar sus auténticas y genuinas creencias e ideas,que también pueden ser religiosas, le darán la posibilidad de obtener una profunda experiencia espiritual, tolerancia y respeto por los demás, habrá aprendido que no siempre es el dueño de la verdad. Ha aprendido a no ser intransigente, a dialogar, a comprender, a escuchar y a no desvalorizar a sus semejantes, ahora puede integrarse armónicamente, conservando el equilibrio y la bondad.
Lo que nos sucede son lecciones y no castigos, todo es LEY DE CAUSA Y EFECTO.

No hay comentarios: