Carta asociada a los signos de Acuario/ Piscis y a los planetas Urano y Neptuno.La cuestión de la salvación; la búsqueda eterna; conocimiento perdido; el inconciente objetivo; las profundidades del arquetipo; la causa original; búsqueda de Dios.
El problema es que usted va detrás del asunto equivocado, por esa razón siempre claudica, pues está enfocado en la subjetividad, encandilado con ideas que se esfuman que se desvanecen en la irrealidad.
Se ha desviado del camino correcto, el que lo llevaría a lograr aclarar sus dudas, sus titubeos, su huíida de una realidad que terminará forzosamente por imponerse. No hay otra senda, tiene que olvidar sus fantasías y buscar la objetividad, para encontrar así una respuesta adecuada y conveniente. No se da cuenta que está corriendo en círculos que no lo llevan a ningún sitio.
Su actitud lo lleva a pensar y ocuparse sólo de sí mismo y desvía su senda alejándose de su verdadera misión, que es situarse en la pura realidad.
Siente inquietud por su salvación, por la búsqueda de la verdad eterna, por lo que está más allá de su actual entendimiento, la vida del alma puede ser profunda, con una gran sensibilidad, que llega a las fibras más sutiles de su espíritu.
Su fin y su más preciado objetivo,está en el misterio de lo divino, en las profundidades del arquetipo, en la causa primigenia, encontrar a Dios, solo necesita la confianza en la fuerza que mueve el univeso, en las leyes que crean la vida y la seguridad que mediante todo eso, alcanzará un día su objetivo más importante.
Mantenga sus emociones controladas, no pierda su gentileza, su tolerante y equilibrado altruismo humanitario, sea leal y armonioso.
Debe encontrar coraje para buscar la verdadera respuesta, la que le dará la firmeza de poder comenzar todas las veces que claudique.
La revelación final, significa ascender a un plano superior de la existencia que es el objetivo básico de toda espiritualidad.
Es lograr con mucho trabajo espiritual, la unión en la perfección. El templo del Grial, es el centro vital de la búsqueda de Dios en el infinito, que conduce al encuentro con lo más delicado del espíritu, a la fusión de los planos terrenales y los planos sutiles y etéreos. El encuentro con la verdad, con lo que tanto ha necesitado y deseado y lo que en un momento creyó perdido, ahora brilla la luz del entendimiento, del saber, de la verdad tan ansiosamente buscada.
Con ésta carta, termina éste humilde y pequeño aporte, entregado con mucho afecto.
Mil gracias y felicidades para tod@s. Un gran abrazo Isthar
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